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lunes, 24 de octubre de 2016

CONFERENCIAS: FORO CAPRINO DE HEUS 2016 EN ANTEQUERA (ESPAÑA)

13 de octubre de 2016 en Antequera (Málaga, España), contando con una gran asistencia de productores de diversas regiones españolas. En esta edición el evento ha sido patrocinado por la empresa De Heus Nutrición Animal, con la colaboración de Alfonso Romero, de Agrigansur, distribuidor de la marca Biona en la región. Más de un centenar de ganaderos de la zona y de provincias limítrofes y algunos técnicos y funcionarios de las Administraciones públicas pudieron seguir las conferencias impartidas e intervenir activamente en el coloquio que tuvo lugar al final de la jornada.

La dirección y presentación del Foro corrió a cargo de Manuel Caro, gerente de zona y especialista en ganado caprino de la empresa De Heus Nutrición Animal. 

En la primera conferencia de la jornada, Juan Manuel Sánchez Martínez, director comercial de la empresa De Heus en Andalucía, presentó las principales señas de identidad de la nueva compañía que sustituye a la anterior Núter, dando a conocer las líneas de actuación del nuevo proyecto empresarial y su estrategia para colaborar, impulsar y desarrollar las explotaciones ganaderas, bajo el lema de 'Powering Progress'.

Bajo el título ¿Cómo puedo comenzar a aplicar medidas de Bioseguridad  en mi explotación?, Jorge Gutiérrez González, técnico de campo y especialista en rumiantes de la empresa MSD Animal Health, expuso las principales actuaciones a tener en cuenta a la hora de implantar un programa sanitario eficaz en las explotaciones caprinas. 

La tercera conferencia fue desarrollada por José Luis Ares Cea, especialista agroalimentario del Ifapa abordando, bajo el título ¿Vender leche o hacer queso?, las diferentes alternativas que tienen los ganaderos de caprino lechero a la hora de definir sus estrategias de futuro, principalmente aquellas dirigidas a asegurar la rentabilidad de las explotaciones a medio y largo plazo. 

Tras las conferencias se estableció un coloquio en el que participaron los tres intervinientes y Felipe Zan, jefe de producto de pequeños rumiantes, debatiéndose sobre las sucesivas caídas de los precios de la leche de cabra y sus previsiones a corto plazo, así como la rentabilidad actual de las explotaciones y el futuro de la ganadería caprina en la región. Se expusieron los resultados positivos obtenidos con la incorporación de innovaciones alimentarias, entre ellas, la incorporación de aminoácidos a los piensos suministrados al ganado caprino. Finalmente, se comentaron las buenas posibilidades de comercialización de los quesos artesanos elaborados con leche pura de cabra, con gran demanda en mercados de alimentos selectos, cuyos consumidores buscan productos de calidad diferenciada y más saludables, exentos de sustancias químicas, vinculados al territorio rural y al paisaje, conservando los rebaños de razas autóctonas y los sistemas tradicionales de pastoreo con aprovechamiento de los recursos naturales de la zona, frente a la alternativa de vender la leche a las grandes industrias queseras caracterizadas por las producciones masivas de calidad estandarizada.

José Luis Ares Cea (conferenciante)

martes, 28 de junio de 2016

LECHE DE CABRA CON PRECIOS A LA BAJA (ESPAÑA)

El descenso generalizado de precios de la leche cruda de vaca ya. ha llegado al sector caprino. En este sector no vale argumentar los viejos dichos y expresiones populares de que "todo lo que inicialmente sube, al final baja", o que "al mar revuelto, ganancia de pescadores", e incluso aquello de que "aquí hay muy mala leche", en un vano intento por explicar lo inexplicable, aunque esta situación entraba dentro de las previsiones de muchos especialistas. 

Si las estadísticas no nos engañan no hay excedentes de leche de cabra en la Unión Europea, tampoco en España, y los productos lácteos de esta especie están lejos del umbral de saturación del mercado. Por mi parte, esperaba una bajada de precios de la leche de esta especie en España, como ocurre frecuentemente en primavera, por ser la época del año de mayor volumen de producción, pero no una caída hasta los precios actuales en muchas zonas, Andalucía entre ellas, por debajo de los 50 céntimos de euro/ litro.

Aunque quiero ser optimista creo que esta situación pude agravarse en el futuro, sobre todo si la gran industria quesera apuesta por el empleo de leche en polvo en sustitución de la leche fresca de cabra, o por su reemplazo total por la de vaca adquirida a "precios de saldo". Mi recomendación para los productores es que no descarten la transformación e industrialización de la leche en los propios establecimientos ganaderos. Asimismo, que los estudiosos de la gestión económica y del proceso de conformación de los precios de la leche de cabra se den mucha prisa por finalizar y publicar sus trabajos ante el riesgo de que sus resultados se queden obsoletos por la cruda realidad del sector. ¡Ojalá me equivoque!




Fuente: Circular informativa (2016). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

viernes, 6 de mayo de 2016

VENDER LECHE O PRODUCTOS LÁCTEOS: INCERTIDUMBRE EN EXPLOTACIONES GANADERAS ESPAÑOLAS

La crisis de precios de la leche está lejos de resolverse. No es un problema exclusivo de España, sino que está afectando prácticamente a todos los países productores, incluidos los de la Unión Europea. Las medidas adoptadas hasta la fecha no han permitido frenar la caída de precios en los pagos a los productores españoles de leche de vaca, generalizándose en los últimos meses sus efectos negativos a la totalidad de las explotaciones lecheras, tanto las de régimen individual como las integradas en cooperativas y otras fórmulas asociativas. 

Los precios que perciben actualmente los productores por la leche que venden están, en muchos casos, por debajo del umbral de rentabilidad de las explotaciones ganaderas, con el consiguiente riesgo para la continuidad de su actividad a corto plazo. Sí a corto plazo, pues ya se están cerrando establecimientos. Y esto es verdaderamente lo preocupante. 

Por otra parte, aunque la caída de precios comenzó con la leche de vaca tras el fin de las cuotas lácteas, debido principalmente a las producciones excedentarias de algunos países-que no es el caso de España-, sin embargo, en esta primavera se han bajado también los precios de la leche de cabra, que precisamente carece de cuotas limitantes por no tener esta especie excedentes lácteos. En este caso, no parece estar justificada dicha caída. Y, para mayor incertidumbre, es difícil prever su evolución en los próximos meses. En mi opinión la situación se presenta muy complicada para las explotaciones lecheras españolas durante los próximos meses.

¿Qué pueden hacer los productores de leche en España? Aunque no me gusta ser pesimista, creo que a corto plazo los precios de la leche no se recuperarán, lo que condenará a muchas explotaciones a continuar perdiendo dinero o a una decisión irreversible, cerrar sus puertas definitivamente. Además, el futuro es muy incierto; ahora mismo, nadie sabe lo que ocurrirá a medio y largo plazos.  

Y mientras tanto, ¿cuál es la solución? No hay soluciones 'mágicas' para problemas estructurales tan graves y extendidos, que no son coyunturales como afirman algunos. No obstante, si se analizan los resultados económicos actuales de muchas de las microempresas artesanales españolas que destinan la leche producida en la ganadería propia a la elaboración en origen de productos lácteos, se puede constatar una revalorización de la materia prima muy superior a los precios de mercado, permitiendo que la actividad sea rentable.

Finalmente, con independencia de las ayudas europeas aprobadas en el marco de la Política Agraria Común (PAC) y de aquellas medidas específicas de apoyo por parte de las Administraciones públicas españolas, seguramente insuficientes para garantizar la rentabilidad de las explotaciones lecheras, mi recomendación general para quienes quieran dar el paso hacia la elaboración de productos lácteos es que comiencen su proyecto empresarial con una capacitación adecuada y una inversión mínima. Tiempo habrá de ampliar las instalaciones a medida que los nuevos productos se vayan afianzando en el mercado.


José Luis Ares (docente)

miércoles, 18 de febrero de 2015

INVESTIGACIÓN: ANALÍTICA QUESO FRESCO DE CABRA (ESPAÑA)

A continuación, se presentan los resultados analíticos de los principales parámetros cualitativos del queso Fresco comercial elaborado con leche de cabra en la región de Andalucía (España). Los datos que se muestran corresponden al trabajo de investigación sobre caracterización de productos lácteos españoles reseñado anteriormente en este blog (entrada 23/01/2015).

1-Composición química (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
-Humedad = 54,7 ± 2,0 (mínimo = 51,6 máximo = 57,1)
-Grasa = 21,8 ± 2,2 (mínimo = 18,5 máximo = 25,0)
-Proteína = 17,4 ± 1,7 (mínimo = 14,8 máximo = 19,8)
-Lactosa = 1,1 ± 0,5 (mínimo = 0,8 máximo = 1,7)
-Ácido láctico = 0,3 ± 0,2 (mínimo = 0,1 máximo = 0,6)
-Cenizas = 3,4 ± 0,3 (mínimo = 3,0 máximo = 3,8)
-Humedad del queso magro = 70,1 ± 2,1 (mínimo = 67,4 máximo = 73,1)
-Grasa del extracto seco total = 48,2 ± 3,9 (mínimo = 42,9 máximo = 53,3)

2-Valor energético (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
-Calorías = 270 ± 23 (mínimo = 240 máximo = 306)

3-Minerales (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
3.1. Sal (gramos):
-Cloruro sódico (ClNa): 1,51 ± 0,24 (mínimo = 1,23 máximo = 1,90)
3.2. Macrominerales (miligramos):
-Calcio (Ca): 543 ± 71 (mínimo = 405 máximo = 626)
-Fósforo (P): 818 ± 598 (mínimo = 331 máximo = 1698)
-Sodio (Na): 480 ± 100 (mínimo = 381 máximo = 672)
-Potasio (K): 90 ± 12 (mínimo = 66 máximo = 103)
-Magnesio (Mg): 88 ± 99 (mínimo = 16 máximo = 242)
3.3. Microminerales (microgramos):
-Cinc (Zn): 2034 ± 372 (mínimo = 1411 máximo = 2555)
-Hierro (Fe): 398 ± 111 (mínimo = 323 máximo = 631)
-Cobre (Cu): 117 ± 68 (mínimo = 57 máximo = 217)
-Manganeso (Mn): 48 ± 12 (mínimo = 34 máximo = 73)

4-Ácidos grasos (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
4.1. Ácidos grasos mayoritarios (en porcentaje de los ácidos grasos totales):
-Ácido butírico (C 4:0-C3H7CO2H): 4,1 ± 0,5 (mínimo = 3,4 máximo = 4,9)
-Ácido caproico (C 6:0-C5H11CO2H): 3,0 ± 0,3 (mínimo = 2,6 máximo = 3,4)
-Ácido caprílico (C 8:0-C7H15CO2H): 2,4 ± 0,6 (mínimo = 1,6 máximo = 3,2)
-Ácido cáprico (C 10:0-C9H19CO2H): 7,0 ± 3,2 (mínimo = 3,6 máximo = 12,0)
-Ácido láurico (C 12:0-C11H23CO2H): 3,9 ± 0,6 (mínimo = 2,9 máximo = 4,6)
-Ácido mirístico (C 14:0-C13H27CO2H): 10,3 ± 1,2 (mínimo = 8,7 máximo = 11,8)
-Ácido miristoleico (C 14:1-C13H25CO2H): 1,5 ± 0,3 (mínimo = 1,2 máximo = 1,9)
-Ácido pentadecílico (C 15:0-C14H29CO2H): 0,9 ± 0,1 (mínimo = 0,7 máximo = 1,0)
-Ácido palmítico (C 16:0-C15H31CO2H): 27,6 ± 1,4 (mínimo = 25,5 máximo = 30,0)
-Ácido palmitoleico (C 16:1-C15H29CO2H): 3,3 ± 0,3 (mínimo = 2,8 máximo = 3,6)
-Ácido margárico (C17:0-C16H33CO2H): 0,5 ± 0,2 (mínimo = 0,2 máximo = 0,8)
-Ácido esteárico (C 18:0-C17H35CO2H): 8,2 ± 0,5 (mínimo = 7,6 máximo = 8,9)
-Ácido oleico (C 18:1-C17H33CO2H): 22,7 ± 1,5 (mínimo = 21,0 máximo = 25,6)
-Ácido linoleico (C 18:2-C17H31CO2H): 2,7 ± 0,7 (mínimo = 1,8 máximo = 3,7)
-Ácido linolénico (C 18:3-C17H29CO2H): 0,9 ± 0,5 (mínimo = 0,3 máximo = 1,9)
4.2. Ácidos grasos libres totales (ml de KOH 0,5 N/ g queso):
-AGLT:

5-Distribución del nitrógeno (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
5.1. Fracciones nitrogenadas (en porcentaje del nitrógeno total):
-Nitrógeno soluble (NS): 14,7 ± 2,7 (mínimo = 11,5 máximo = 19,5)
-Nitrógeno no proteico (NNP): 5,6 ± 1,5 (mínimo = 4,2 máximo = 8,0)
-Nitrógeno amínico (NF): 4,4 ± 1,4 (mínimo = 3,2 máximo = 6,6)
-Nitrógeno amoniacal (N-NH3): 0,4 ± 0,2 (mínimo = 0,2 máximo = 0,6)
5.2. Caseínas (en porcentaje relativo):
-Pre-alfa-caseína: 4,1 ± 2,9 (mínimo = 1,2 máximo = 8,6)
-Alfa-caseína: 27,0 ± 8,7 (mínimo = 12,4 máximo = 36,2)
-Beta-caseína: 34,8 ± 7,6 (mínimo = 26,1 máximo = 45,3)
-Gamma-caseína: 28,0 ± 2,7 (mínimo = 24,8 máximo = 31,7)
-Origen (caseína inmóvil): 6,1 ± 2,4 (mínimo = 4,3 máximo = 11,0)
5.3. Tirosina y triptófano solubles (en miligramos/ 100 gramos de muestra):
-Tirosina (Tyr-NS): 126 ± 75 (mínimo = 32 máximo = 220)
-Triptófano (Trp-NS): 59 ± 24 (mínimo = 28 máximo = 97)

6-Medidas de pH y actividad del agua (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
6.1. pH (en unidades, escala 0-14):
-pH: 6,06 ± 0,37 (mínimo = 5,29 máximo = 6,36)
6.2. Actividad del agua (Aw en unidades, escala 0,0-1,0):
-Aw experimental: 0,984 ± 0,006 (mínimo = 0,972 máximo = 0,992)
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-1: -0,0004 ± 0,0061 (mín = 0,0007 máx = -0,0116)
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-2: 0,0037 ± 0,0066 (mín = -0,0009 máx = 0,0117)
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-3: -0,0003 ± 0,0076 (mín = 0,0022 máx = -0,0136)



Autoría: A. Marcos y colaboradores (1985)
José Luis Ares Cea (recopilación científica)

viernes, 6 de febrero de 2015

INVESTIGACIÓN: ANALÍTICA QUESO IBORES (ESPAÑA)

A continuación, se presentan los resultados analíticos de los principales parámetros cualitativos del queso de Ibores comercial elaborado con leche de cabra en la provincia de Cáceres (España). Los datos que se muestran corresponden al trabajo de investigación sobre caracterización de productos lácteos españoles reseñado anteriormente en este blog (entrada 23/01/2015).

1-Composición química (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
-Humedad = 37,0 ± 3,5 (mínimo = 32,8 máximo = 42,6)
-Grasa = 35,3 ± 3,9 (mínimo = 29,0 máximo = 41,5)
-Proteína = 21,7 ± 2,4 (mínimo = 18,6 máximo = 25,5)
-Ácido láctico = 1,0 ± 0,2 (mínimo = 0,6 máximo = 1,3)
-Cenizas = 5,6 ± 0,7 (mínimo = 5,1 máximo = 7,1)
-Humedad del queso magro = 57,2 ± 3,4 (mínimo = 51,7 máximo = 63,1)
-Grasa del extracto seco total = 55,9 ± 4,3 (mínimo = 48,2 máximo = 62,7)

2-Valor energético (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
-Calorías = 404 ± 31 (mínimo = 363 máximo = 448)

3-Minerales (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
3.1. Sal (gramos):
-Cloruro sódico (ClNa): 3,77 ± 0,25 (mínimo = 3,43 máximo = 4,17)
3.2. Macrominerales (miligramos):
-Calcio (Ca): 496 ± 37 (mínimo = 441 máximo = 545)
-Fósforo (P): 404 ± 106 (mínimo = 305 máximo = 626)
-Sodio (Na): 1394 ± 217 (mínimo = 1200 máximo = 1860)
-Potasio (K): 142 ± 15 (mínimo = 127 máximo = 165)
-Magnesio (Mg): 22 ± 2 (mínimo = 19 máximo = 25)
3.3. Microminerales (microgramos):
-Cinc (Zn): 2808 ± 328 (mínimo = 2403 máximo = 3279)
-Hierro (Fe): 580 ± 90 (mínimo = 417 máximo = 678)
-Cobre (Cu): 129 ± 15 (mínimo = 113 máximo = 158)
-Manganeso (Mn): 240 ± 30 (mínimo = 184 máximo = 276)

4-Ácidos grasos (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
4.1. Ácidos grasos mayoritarios (en porcentaje de los ácidos grasos totales):
-Ácido butírico (C 4:0-C3H7CO2H): 3,0 ± 0,7 (mínimo = 2,7 máximo = 4,5)
-Ácido caproico (C 6:0-C5H11CO2H): 3,8 ± 0,4 (mínimo = 3,0 máximo = 4,3)
-Ácido caprílico (C 8:0-C7H15CO2H): 4,1 ± 0,3 (mínimo = 3,5 máximo = 4,4)
-Ácido cáprico (C 10:0-C9H19CO2H): 12,6 ± 0,4 (mínimo = 12,1 máximo = 13,2)
-Ácido láurico (C 12:0-C11H23CO2H): 4,3 ± 0,3 (mínimo = 3,8 máximo = 4,7)
-Ácido mirístico (C 14:0-C13H27CO2H): 9,4 ± 0,7 (mínimo = 8,5 máximo = 10,5)
-Ácido miristoleico (C 14:1-C13H25CO2H): 0,1 ± 0,0 (mínimo = 0,0 máximo = 0,1)
-Ácido pentadecílico (C 15:0-C14H29CO2H): 0,6 ± 0,1 (mínimo = 0,5 máximo = 0,8)
-Ácido palmítico (C 16:0-C15H31CO2H): 23,1 ± 1,3 (mínimo = 21,4 máximo = 25,2)
-Ácido palmitoleico (C 16:1-C15H29CO2H): 1,0 ± 0,3 (mínimo = 0,8 máximo = 1,6)
-Ácido margárico (C17:0-C16H33CO2H): 0,2 ± 0,1 (mínimo = 0,1 máximo = 0,4)
-Ácido esteárico (C 18:0-C17H35CO2H): 10,6 ± 0,5 (mínimo = 10,1 máximo = 11,6)
-Ácido oleico (C 18:1-C17H33CO2H): 23,6 ± 1,2 (mínimo = 21,7 máximo = 25,6)
-Ácido linoleico (C 18:2-C17H31CO2H): 2,2 ± 0,6 (mínimo = 1,9 máximo = 3,5)
-Ácido linolénico (C 18:3-C17H29CO2H): 0,4 ± 0,2 (mínimo = 0,1 máximo = 0,7)
4.2. Ácidos grasos libres totales (ml de KOH 0,5 N/ g queso):
-AGLT: 0,81 ± 0,16 (mínimo = 0,57 máximo = 1,09)

5-Distribución del nitrógeno (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
5.1. Fracciones nitrogenadas (en porcentaje del nitrógeno total):
-Nitrógeno soluble (NS): 22,2 ± 4,4 (mínimo = 16,3 máximo = 27,9)
-Nitrógeno no proteico (NNP): 11,4 ± 2,6 (mínimo = 8,3 máximo = 16,3)
-Nitrógeno amínico (NF): 6,1 ± 1,5 (mínimo = 4,4 máximo = 8,5)
-Nitrógeno amoniacal (N-NH3): 2,7 ± 0,8 (mínimo = 1,4 máximo = 3,9)
5.2. Caseínas (en porcentaje relativo):
-Pre-alfa-caseína: 4,1 ± 0,7 (mínimo = 2,8 máximo = 5,2)
-Alfa-caseína: 13,4 ± 1,7 (mínimo = 11,7 máximo = 16,1)
-Beta-caseína: 45,4 ± 3,9 (mínimo = 38,3 máximo = 50,3)
-Gamma-caseína: 32,9 ± 4,7 (mínimo = 26,4 máximo = 40,1)
-Origen (caseína inmóvil): 4,1 ± 1,5 (mínimo = 2,7 máximo = 6,5)
5.3. Tirosina y triptófano solubles (en miligramos/ 100 gramos de muestra):
-Tirosina (Tyr-NS): 175 ± 43 (mínimo = 143 máximo = 268)
-Triptófano (Trp-NS): 46 ± 6 (mínimo = 39 máximo = 58)

6-Medidas de pH y actividad del agua (valores medios y desviaciones típicas, en peso por 100 gramos de muestra):
6.1. pH (en unidades, escala 0-14):
-pH: 5,79 ± 0,48 (mínimo = 5,30 máximo = 6,77)
6.2. Actividad del agua (Aw en unidades, escala 0,0-1,0):
-Aw experimental: 0,916 ± 0,017 (mínimo = 0,883 máximo = 0,939)
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-1:
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-2: 0,0011 ± 0,0070 (mín = 0,0010 máx = -0,0094)
-Diferencia Aw experimental calculada ecuación-3: -0,0131 ± 0,0065 (mín = -0,0037 máx= -0,0244)




Autoría: A. Marcos y colaboradores (1985)
José Luis Ares Cea (recopilación científica)

jueves, 30 de octubre de 2014

5-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

En los estudios realizados sobre la composición de la leche de cabra se ha constatado que sus constituyentes son sintetizados a partir de precursores presentes en el plasma sanguíneo, captados por las células de la glándula mamaria, como glucosa, acetato y ácidos grasos no esterifícados, que son utilizados para dicho proceso de síntesis o como sustrato energético que lo hace posible, siendo dependiente ambas formas de utilización del estado nutricional del animal. 

Diversos investigadores han estudiado estos procesos en cabras alimentadas con dietas equilibradas, demostrando que solo el acetato y la glucosa participan en el catabolismo oxidativo y lo hacen en una proporción 2 a 1. En este sentido, la glándula mamaria utiliza cerca de los 2/3 de la cantidad disponible de estos metabolitos en la sangre del animal, siendo oxidados el 44% de acetato y el 25% de la glucosa.

En las variaciones de la composición de la leche intervienen distintos aspectos, entre ellos, la  raza, las características genéticas de cada animal, la alimentación, los factores medioambientales, el momento de la lactación, etc. En lo concerniente a los componentes mayoritarios de la leche de cabra, su composición media oscila bastante, según los estudios realizados por diferentes autores, entre los siguientes valores: 

-Sólidos totales = 11,70-15,21%
-Proteína (N x 6,38) = 2,90-4,60%
-Grasa = 3,00-6,63%
-Lactosa = 3,80-5,12%
-Cenizas = 0,69-0,89%
-pH = 6,41-6,70

Las variaciones más importantes debidas a la estación del año, son las existentes entre la leche producida en invierno-primavera, y la obtenida en verano; en climas templados, la leche de verano tardío contiene menor cantidad de grasa y de extracto seco magro, que pueden llegar hasta las dos unidades porcentuales para la grasa y una para el extracto. Junto con ello, también influye el momento de la lactación, registrándose fluctuaciones en la composición de la leche que son más pronunciadas en la cabra que en la vaca. No obstante, la alimentación del animal sea posiblemente la que presenta una mayor incidencia en la composición de la leche, especialmente sobre sus contenidos en proteína, grasa, vitamina A, así como en algunas propiedades organolépticas, entre ellas, el olor y el sabor, principalmente. 

En relación con las proteínas de la leche, tienen una gran influencia los caracteres genéticos de cada cabra, junto con las características energéticas y proteicas de la dieta suministrada al ganado, siendo posiblemente la mayor o menor degradabilidad de la proteína en el rumen del animal el factor que ejerce más influencia sobre el contenido proteico total de la leche.

Asimismo, el porcentaje en grasa de la leche y su composición, depende principalmente del fondo genético del animal, así como de la naturaleza y composición de la dieta suministrada, que incide sobre los procesos de fermentación ruminal, modificando la producción de los distintos ácidos grasos, y con ello el contenido en grasa de la leche. Con carácter general, la modificación de la composición de la leche en los rumiantes es más difícil que la de los animales monogástricos, debido al proceso de hidrogenación de la grasa de los forrajes y piensos en el rumen, provocando el incremento del contenido de ácidos grasos saturados y reduciendo el de los esenciales en la leche. En este sentido, el uso de grasas protegidas, suministradas en los piensos, hace posible evitar el obstáculo del rumen, resultando ser una buena estrategia para mejorar la calidad de la leche, aumentando el contenido de ácidos grasos poliinsaturados (PUFAs), cuyos efectos beneficiosos sobre el metabolismo lipídico del organismo humano parecen fuera de toda duda.

En anteriores estudios realizados por este equipo de investigadores en cabras de razas autóctonas andaluzas, se suministró a las cabras una dieta suplementada con una grasa protegida rica en PUFAs, en forma de jabón cálcico, encontrando, frente al grupo 'testigo' (sin suplemento de grasa protegida), un aumento significativo en el nivel de ácidos grasos poliinsaturados, con porcentajes de 6,67% frente a 3,91%, que principalmente afectaba a los ácidos C18:3, C20:2 y C20:3-C20:4, provocando una relación saturados/insaturados más favorable, alcanzando valores de 2,36 frente a 3,38 del grupo testigo.

A continuación, se muestran los valores de composición de la leche de cabra y de vaca, respecto a la de la especie humana: 

-Sólidos totales (en %): Mujer = 12,0 Cabra = 15,2 Vaca = 12,4
-Sólidos no grasos (en %): Mujer = 8,3 Cabra = 9,2 Vaca = 8,7
-Proteína (en %): Mujer = 1,1 Cabra = 3,3 Vaca = 3,2
-Grasa (en %): Mujer = 3,7 Cabra = 6,0 Vaca = 3,7
-Lactosa (en %): Mujer = 6,9 Cabra = 5,1 Vaca = 4,8
-Cenizas (en %): Mujer = 0,3 Cabra = 0,8 Vaca = 0,7
-Energía (kcal/100 ml): Mujer = 68,0 Cabra = 88,3 Vaca = 69,0


Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

martes, 14 de octubre de 2014

QUESO A QUESO: Málaga

MÁLAGA: es un queso de receta tradicional elaborado con leche de cabra, en varios municipios de la provincia española del mismo nombre, a partir de leche de la raza autóctona Malagueña; también se conoce como queso de 'Las Serranías de Málaga', o de 'Los Montes de Málaga'; actualmente, carece de una denominación de origen que proteja su calidad diferenciada. Se clasifica dentro del grupo de los quesos de coagulación enzimática y pasta prensada no cocida, elaborándose tanto frescos como madurados con distintos tiempos de curación (tierno, semicurado, curado, viejo y añejo). Es un queso graso, con una forma cilíndrica y de caras ligeramente planas; sus dimensiones son variables sin sobrepasar los 10 y 20 centímetros de altura y diámetro, respectivamente; su peso es inferior a 3 kilogramos, generalmente entre 1,0 y 2,0 kg, aunque más recientemente se están elaborando quesos de tamaño más pequeño (250-500 gr). Se admiten las elaboraciones con leche cruda y pasterizada, así como las presentaciones naturales con aceite de oliva, y diferentes especias, o recubierto de cera o mediante el parafinado o plastificado exterior de las piezas enteras con materiales poliméricos con o sin colorantes, así como su envasado al vacío, tanto en piezas enteras como en porciones y lonchas protegidas por una película extensible de material plástico de uso alimentario. La corteza tiene una consistencia blanda o semidura según el tipo de queso, con un color blanco en los quesos frescos y tiernos y blanco-amarillenta en los más oreados; se caracterizan por tener siempre las caras superior e inferior marcadas con el dibujo del 'entremiso', y la superficie lateral con el grabado típico del 'cincho' de esparto. La pasta es semiblanda o más dura en los quesos de mayor curación, con una consistencia media y compacta, de coloración blanca brillante o ligeramente marfil, variando en intensidad hasta alcanzar tonalidades menos blanquecinas a medida que avanza la curación; su textura es firme al corte y generalmente cerrada (sin ojos) o bien con escasos orificios repartidos regular o irregularmente; la textura es algo elástica en los quesos frescos, con adherencia media en la boca, ligeramente mantecosos, y cierta cremosidad y solubilidad; los quesos curados presentan buen comportamiento a la masticación, pudiendo resultar algo granulosos al paladar los de maduración prolongada. Su olor es de intensidad media-alta, y ligeramente láctico los menos curados, con notas a frutos secos los más viejos. Su sabor es levemente ácido y dulzón, característico de los quesos de cabra, algo salado, pudiendo apreciarse suaves notas picantes en los muy curados; el gusto residual es equilibrado, recordando a los granos tostados; su persistencia global varía de media a alta.




Fuente: J. L. Ares. Tesis doctoral. Caracterización de quesos de Andalucía (variedad incluida en el listado europeo de productos lácteos tradicionales, Decisión Comisión Europea, 1996).
Texto: José Luis Ares Cea

martes, 5 de agosto de 2014

4-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

A continuación, se exponen algunas de las principales características organolépticas de la leche de cabra que, en mayor o menor medida, la diferencian de las leches de otras especies animales. A simple vista se aprecia que la leche de cabra es más blanca que la de vaca, ya que no contiene carotenos, que son los responsables del color amarillento de la leche de vaca. Su olor es más fuerte, como consecuencia de la absorción de compuestos aromáticos durante el manejo de los animales en las explotaciones ganaderas, frecuentemente inadecuado, con la presencia de machos en los lugares de ordeño o en las proximidades, la higiene incorrecta de los establos y de las instalaciones de almacenamiento de la leche, la tardanza en el filtrado y enfriamiento tras el ordeño, etc. 

A nivel de industria láctea existen tratamientos para eliminar o reducir estos olores en la leche de cabra, mediante maquinaria específica para su desaireación o desodorización al vacío. Por otra parte, se conoce, desde hace años, la existencia de una correlación positiva entre la tasa de ácidos grasos libres de la leche de cabra y la intensidad del "sabor a cabra", debida principalmente a la presencia de ácidos grasos de cadena ramificada tipo 4-metiloctanoico y 4-etiIoctanoico; también las mayores concentraciones de los ácidos grasos cáprico, caproico y caprílico, de 6, 8 y 10 átomos de carbono, confieren a esta leche un sabor característico. Igualmente su mayor contenido en cloro y otros minerales frente a la leche de vaca, le dan un sabor ligeramente salobre.

Otra característica diferenciadora de la leche de cabra es su mayor alcalinidad, con un pH de 6,7, en comparación con la leche de vaca, ligeramente ácida, asociado a una tasa proteica superior y las diferentes combinaciones de sus fosfatos en la primera, lo que la hace muy adecuada para su consumo por personas con problemas de acidez. Algunos alimentos naturales o especies vegetales que pueden formar parte de la dieta de las cabras, entre ellos, los géneros Brassica, Lupinus, Verbena, Xanthium, Digitalis, Eupatorium, Capsella, etc., así como diversas plantas aromáticas o la pulpa de remolacha, pueden conferir olores y sabores extraños a la leche y a sus productos derivados.

La leche de cabra tiene una densidad que oscila de 1,026 a 1,042, variación que es debida, en gran medida, a su contenido de grasa y de sólidos no grasos. El punto de congelación de la leche de cabra está próximo a los -0,590 °C, inferior al de la leche de vaca (-0,540 °C), como consecuencia de la mayor concentración en solutos de la primera.



Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

lunes, 30 de junio de 2014

7-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

La leche contiene hidratos de carbono o carbohidratos, mayoritariamente lactosa (azúcar), y otras cantidades de monosacáridos y oligosacáridos en pequeña proporción. En el caso de la lactosa, su contenido en la leche de cabra varía entre 3,8 a 5,1%, bastante similar al contenido en la leche de vaca, pero muy inferior al existente en la leche de la mujer, alrededor del 7,4%. Respecto a su composición química, la lactosa en un disacárido, formado por D-galactosa y D-glucosa, que solo se encuentra de forma natural en la leche. 

Por su carbono anomérico (carbonílico) la glucosa puede transformarse en un disacárido reductor; la lactosa presenta dos formas isómeras: 'alfa' y 'beta', que se hallan en equilibrio en la leche, en una proporción del 38% y 62% (casi 2/3 partes), respectivamente. Por otra parte, es conocido que la beta-lactosa favorece la formación de una flora intestinal acidófíla ('bifidus'), mientras que la alfa-lactosa induce a una microbiota de medio alcalino (coliformes y enterococos).

Las lactasas, imprescindibles para la hidrólisis de la lactosa en glucosa y galactosa, sean de origen intestinal o microbiano, producen beta-d-galactosidasas, que sólo pueden actuar sobre los beta-galactósidos, y entre ellos, la beta-lactosa. Por ello cuanto más elevada sea en la leche la proporción de beta-lactosa, más fácil sera el ataque microbiano para su posterior absorción. A medida que la beta-lactosa va desapareciendo por la hidrólisis y la absorción, la alfa-lactosa se irá transformando en el isómero beta para restablecer el equilibrio natural. Esta transformación es lenta y, a medida que vaya disminuyendo el contenido intestinal de lactosa, dicha actividad se ralentiza, quedando una parte de la alfa-lactosa sin transformarse en 'beta', pasando al intestino grueso donde continúa el proceso. 

La ingesta de productos lácteos con elevadas proporciones de alfa-lactosa, determina alteraciones en el equilibrio alfa/beta, siendo causas de trastornos en la absorción de este carbohidrato. La lactosa ingerida es hidrolizada por la lactasa en la superficie de las células de la mucosa intestinal, pero deficiencias de esta enzima pueden producir diarreas, flatulencias (CO2 y H2), debido al aumento de moléculas del disacárido osmóticamente activas, que permanecen en la luz intestinal aumentando el volumen del contenido del intestino. Esta intolerancia a la lactosa puede superarse, con la administración de preparados comerciales de lactasa, pero resulta caro. El yogur, en dichas personas, puede ser mejor tolerado que la leche, debido a que este producto contiene su propia lactasa de origen bacteriano. Actualmente, existen en el comercio productos lácteos sin lactosa para su consumo directo, pero en su mayoría son derivados de la leche de vaca.

La intolerancia a la lactosa es un tema importante, ya que en casi todos los mamíferos y en diversas razas humanas, la actividad lactásica intestinal es alta al nacer, declina durante la niñez y permanece baja en la edad adulta; estos valores bajos de lactasa se asocian a la intolerancia al consumo de leche y productos lácteos que contienen lactosa. La mayoría de los europeos y sus descendientes americanos conservan su actividad lactásica intestinal en la edad adulta, ya que sólo un 15% de los europeos del norte y los de occidente son deficientes en lactasa; por el contrario, esta deficiencia aumenta significativamente en las personas de raza negra, indios americanos, asiáticos, y poblaciones árabes mediterráneas, alcanzando incluso valores del 70 al 90%. 

Diferentes estudios ponen de manifiesto que diversas poblaciones (africanas y asiáticas) producen menos beta-galactosidasa, lo que provoca problemas de malabsorción de la lactosa, con frecuentes colitis, formación de gases intestinales y dolores abdominales. En España, se efectúo un trabajo sobre la respuesta a una sobrecarga oral de lactosa, encontrándose que el 27% de la muestra de la población presentan algunos síntomas de intolerancia a dicho disacárido.

En el caso de la leche de cabra, la mayor tolerancia de la lactosa parece deberse a su mayor digestibilidad frente a la leche de vaca, pudiendo en este sentido existir una interacción entre cantidad y calidad de la proteína y la naturaleza de su coagulación y, en consecuencia, tasas más adecuadas de liberación de nutrientes desde el estómago al intestino, que podrían optimizar la utilización digestiva de la lactosa. 

Con carácter general, la intolerancia a la lactosa no implica la no ingestión de algunos productos lácteos, ya que se pueden consumir preparados con lactosa hidrolizada, o queso curado que pierde la mayoría de este azúcar durante el proceso de maduración, así como otros alimentos fermentados donde la lactosa no está presente. 

Entre los aspectos positivos de la presencia de lactosa, hay que destacar que su presencia aumenta la absorción intestinal de calcio y fósforo en personas ancianas, ya que dicha absorción desciende con la edad. En este sentido, se ha constatado que los ancianos tienen disminuida la capacidad de sintetizar y responder a la 1,2 5-dihidroxi-vitamina D, previniendo la osteoporosis. En este sentido, se ha comprobado que la adición de leche a dietas basadas en cereales y legumbres incrementa significativamente la absorción del calcio, efecto protector que, asimismo, tendría sobre la precipitación del hierro y calcio ejercida por los fitatos contenidos en dichos alimentos. En definitiva parece ser la lactosa la responsable del llamado "factor leche", que aumenta la absorción de calcio, presentando un efecto similar la glucosa y galactosa.


Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

viernes, 27 de junio de 2014

6-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

A continuación, se exponen las principales características de las proteínas de la leche de cabra, según los diversos estudios realizados desde hace años; en este sentido, se ha constatado que los aminoácidos plasmáticos identificados mediante el análisis de la sangre que entra y sale de la ubre o por la transferencia de sustancias marcadas, son los precursores de los de la leche. 

En la cabra se había demostrado la existencia de una alta y constante extracción de algunos aminoácidos, así como débiles o variables diferencias arteriovenosas en otros casos, encontrando también que la captación de todos los aminoácidos esenciales y de algunos no esenciales, resultan suficientes para justificar los correspondientes residuos aminoacídicos en las proteínas lácteas, mientras que otros ingeridos en cantidad insuficiente (serina y alanina), pueden ser parcialmente sintetizados en el tejido animal. 

La composición aminoacídica de la leche de cabra, presenta los valores siguientes, medidos sobre el porcentaje de proteína: 

-Cistina = 1,14
-Metionina = 3,42
-Tnptófano = 7,64
-Aspártico = 6,53
-Glutámico = 22,08
-Serina = 5,58
-Histidina = 3,55
-Glicina = 2,41
-Treonina = 5,01
-Alanina = 4,75
-Arginina = 2,92
-Tirosina = 3,59
-Valina = 6,60
-Fenilalanina = 5,84
-lsoleucina = 5,30
-Leucina = 7,72
-Lisina = 6,42

La leche de cabra contiene alrededor de 5,2 gramos de nitrógeno total por kilogramo, que se convierten en 33,2 g de proteína. Las proteínas mayoritarias de la leche de cabra, al igual que sucede en la de vaca, son las caseínas que se caracterizan porque precipitan a pH 4,6; mientras que las proteínas del lactosuero permanecen en solución a dicho valor de acidez, entre las que se encuentran la alfa-lactoalbúmina, beta-lactoglobulina, inmunoglobulinas, péptidos, y otras proteínas menores, algunas de ellas con carácter enzimático. Por otra parte, en la proteína láctea se han identificado seis componentes en la glándula mamaria: alfaS1-caseína, alfaS2-caseína, beta-caseína, kappa-caseína, beta-lactoglobulinas, y alfa-lactoalbúminas, que presentan polimorfismo genético debidos a los genes autosomales, alélicos, codominantes. En el fraccionamiento de las caseínas y en las proteínas del lactosuero de la leche de cabra se aprecian importantes diferencias con respecto a la leche de vaca, como se muestra a continuación (valores expresados en porcentajes relativos de las distintas fracciones sobre la proteína total de la leche de cada especie animal): 

-AlfaS1-caseína: Cabra = Vaca = 30,6
-AlfaS2-caseína: Cabra = 23,5* Vaca = 8,0 * El valor engloba las dos fracciones alfaS-caseína
-Beta-caseína: Cabra = 45,0 Vaca = 28,4
-Kappa-caseína: Cabra = 5,6 Vaca = 10,1
-Beta-lactoglobulina: Cabra = 15,5 Vaca = 9,8
-Alfa-lactoalbúmina: Cabra = 7,1 Vaca = 3,7
-Albúmina sérica: Cabra = 3,4 Vaca = 1,2
-Inmunoglobulinas: Cabra = Vaca = 2,1

Chandan y colaboradores (1992), demostraron que la leche de cabra contiene niveles mayores de alfaS2-caseína que la leche de vaca, siendo por contra, menores los valores conjuntos de las fracciones de alfaS1-caseína y alfaS2-caseína, en comparación con la alfaS1-caseína de la vaca, indicando que estas diferencias pueden explicar las propiedades de formación del precipitado de la leche de cabra durante los procesos digestivos, las características reológicas en la fabricación del queso, así como peculiar textura en las leches fermentadas. En general, el nivel de alfaS1-caseína en la leche de cabra es muy variable, alcanzando valores medios de 2,7 gramos/litro, debido a que la expresión de esta fracción caseínica está regulada genéticamente, encontrándose una elevada proporción de cabras con bajos contenidos en alfaS1-caseína, como sucede con la raza Alpina francesa. 

Analizando la diferente composición de las fracciones caseínicas de las leches de cabra y de vaca mediante la técnica de electroforesis rápida, se pueden detectar adulteraciones por mezcla de ambas leches en porcentajes muy pequeños (1% de leche de vaca en cabra). Por otra parte, las principales proteínas del lactosuero, alfa-lactoalbúmina y beta-lactoglobulina, presentan también diferencias entre las leches de cabra y de vaca, que es posible determinar analíticamente mediante ciertas técnicas inmunológicas. 

A medida que avanza el período de lactación de la cabra, los grupos proteicos y sus fracciones se incrementan, salvo las proteínas del suero que decrecen; asimismo, mediante análisis discriminante de todos los periodos de la lactación se ha puesto de manifiesto que la alfa-caseína y la beta-lactoglobulina difieren significativamente con mayores variaciones durante esta fase que el resto de las proteínas lácteas. En otras investigaciones se observaron cambios en la fracción caseínica en la leche de cabra a lo largo de la lactación, señalando una disminución de la concentración de la alfaS2-caseína a medida que avanza ésta, consecuente con la susceptibilidad a la proteolisis, así como un aumento en la concentración de la kappa-caseína. Igualmente se ha constatado una correlación negativa entre la beta-caseína y la gamma-caseína respecto a la producción de leche, en paralelo a la involución de la glándula mamaria y el tiempo transcurrido. 

En cuanto a las concentraciones en proteínas menores y enzimas, las principales en la leche de cabra son: lactoferrina (20-200 microgramos/ml), prolactina (44), transferrina (20-200) e inmunoglobulinas (IgA = 30-80; IgM = 10-40 y IgG = 100-400), siendo estas cantidades comparables a la leche de vaca. El contenido de lactorrefina en la leche de cabra es de 10 a 100 veces menor del existente en la leche de la mujer. En cuanto al alto contenido de inmunoglobulinas, especialmente de la de tipo IgG, responde a la presencia de antigenos derivados de la acción de bacterias y virus que entran en la glándula mamaria vía conducto del pezón. 

La distribución de los enzimas en la leche de cabra y vaca es bastante diferente, siendo la actividad proteolítica de la leche fresca de cabra más alta que la de vaca, mientras que la de la xantina-oxidasa es un 10% menor que la de esta última especie. Asimismo, la lipolisis de la leche de cabra es muy distinta a la de vaca, generándose en la primera ácidos grasos libres y productos aromáticos característicos, debidos a la presencia de la protein-lipasa en varios componentes de la leche de cabra. En la crema, suero y fracciones caseínicas de la leche de cabra la actividad lipolítica llega a ser del 46, 46, y 8% de la total, mientras que en la vaca el 78% de dicha actividad aparece asociada a la caseína, el 6% se relaciona con la crema y el 16% con el suero; en la leche humana, esta actividad lipásica se localiza en el 92% en la fase de crema.

Durante el calentamiento y posterior enfriamiento rápido de la leche de vaca se produce una acusada separación de la nata facilitada por la aglomeración de las euglobulinas del plasma lácteo; sin embargo, en la grasa de la leche de cabra no se observa este fenómeno tan claramente, que podría deberse al pequeño tamaño de los glóbulos grasos y a sus bajos contenidos en euglobulinas y aglutininas, como responsables de escasa formación de la capa de nata y de la pérdida de consistencia durante su enfriamiento posterior. 

Las consecuencias tecnológicas de las diferencias existentes entre las leches de cabra y de vaca, especialmente, en los contenidos de las fracciones caseínicas (alfaS1, alfaS2, beta y kappa), junto con el diámetro de las micelas, se aprecian claramente en la fabricación de determinados productos lácteos, entre ellos, el queso, principalmente, en su comportamiento durante los procesos de sedimentación, proteolísis y por su distinta capacidad de unión con el agua. 

En cuanto a la composición nitrogenada, la leche de cabra contiene un mayor porcentaje de nitrógeno no proteico (NNP) que la vaca, con valores cercanos al 9 y 5% del nitrógeno total, respectivamente, pudiendo en la primera alcanzar valores de 40 mg/100 ml. Igualmente, la leche de cabra tiene más caseína soluble y una proporción más baja de proteína coagulable frente a la leche de vaca. Finalmente, en el proceso de fabricación del queso, el comportamiento de la leche de cabra ante la acción de los enzimas del cuajo es diferente al de la leche de vaca, obteniéndose un coágulo menos firme, con una coagulación y un desuerado que pueden ser más rápidos, pero dando lugar a la formación de un gel de baja cohesión, más frágil, y mayores pérdidas de 'finos', lo que llega a condicionar negativamente el rendimiento quesero.


Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

jueves, 26 de junio de 2014

3-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

La leche de cabra se puede considerar, en sentido amplio, como un alimento muy particular, cuya composición sin duda le confiere la posibilidad de consumirla en forma fresca o líquida, tras su correspondiente higienización, o como materia prima en los procesos de elaboración de diversos productos lácteos, entre ellos, las distintas variedades y tipos de quesos, sin olvidar su utilización creciente en las nuevas estrategias de los productos de diseño.

Las principales diferencias entre las distintas especies de rumiantes productoras de leche, vaca, cabra y oveja, conciernen a la esfera reproductiva, susceptibilidad a determinadas enfermedades, y muy particularmente las nutritivas, con distinto comportamiento alimentario y eficiencia en la utilización de los nutrientes, circunstancias que finalmente afectan a la composición de su leche. En lo relativo a la composición de la de cabra, se la considera en la actualidad como poseedora de unas características sumamente beneficiosas, que le confieren un alto interés como alimento, o en estudios nutricionales y en investigaciones médicas sobre sus posibles efectos beneficiosos en la salud humana.

En este sentido, cabe recordar las reacciones adversas que a veces se presentan por el consumo de leche de vaca por parte de determinadas personas, debido a las alergias frente a ciertas fracciones de su proteína, así como la intolerancia a su lactosa, que frecuentemente podrían evitarse por el simple cambio a leche de cabra. Desde hace muchos años, ya se conocía el beneficio del consumo de leche de cabra en las personas con problemas de acidez, úlcera de estómago, colitis, desórdenes digestivos, de hígado y vesícula biliar, asma, migraña, eczemas, postración y debilidad nerviosa general. Asimismo, se ha comprobado su aptitud en la nutrición de convalecientes y ancianos, dada la elevada digestibilidad de su proteína y grasa. Más recientemente, se ha demostrado de forma experimental que el consumo de las dietas que contienen leche de cabra reduce el colesterol total, y el denominado LDL ("colesterol malo"). Por otra parte, existen numerosos ejemplos del uso de la leche de cabra con fines medicinales, como en el caso de Suiza, la mantequilla caprina se emplea en pomadas para los tratamientos de la artrosis, artritis, reumatismo y neuritis.

En el Departamento de Nutrición Animal de la Estación Experimental del Zaidín, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC Granada), se viene trabajando desde el incio de la década de los años sesenta del siglo pasado, en la nutrición de la especie caprina y en su repercusión sobre la producción y la composición de la leche de cabra (Varela y Boza, 1960; Varela y col.,1960; Ferrer,1961; Varela y col.,1961; Gómez-Guillamón y col.,1961; López Grande y col, 1962; Varela y col.,1962, etc.).

Por otra parte, en los últimos años se han realizado una serie de proyectos de investigación, tendentes a definir e incluso mejorar la composición y la calidad de la leche de cabra. Dichas actuaciones se encuadran dentro de los proyectos de I+D: "Mejora de la calidad de la producción de la leche de cabra por manipulación de la alimentación", y "Establecimiento de la calidad total de la leche de cabra", proyecto coordinado integrado por dos líneas de actuación "Nuevas tecnologías en la mejora de la calidad nutritiva y saludable de la leche de cabra y de sus productos derivados" y "Utilización nutritiva de la leche de cabra en síndromes de malabsorción".

El objetivo esencial del primero de los proyectos citados, ha sido el de llegar a establecer la posibilidad de cambios de ciertos aspectos de la composición de la leche por medio de la manipulación de la alimentación de las cabras productoras, mediante el uso de dietas diseñadas para dicho alcanzar propósito, dirigido a conseguir cambiar la producción láctea de la cabra, por efecto de la utilización de los nutrientes de distinta naturaleza fisicoquímica suministrados a los animales durante la fase de lactación, y analizar las repercusiones de estos cambios en la calidad nutricional y tecnológica de la leche de los rebaños estudiados. Por otra parte, el proyecto coordinado, se apoyó en los estudios realizados anteriormente, para diseñar y aplicar una serie de estrategias alimenticias tendentes a modificar, especialmente, la cantidad y calidad de la proteína y de la grasa de la leche de cabra, con objeto de optimizar determinados procesos productivos y su eficiencia nutritiva. Igualmente se establecieron las diferencias de composición entre leche de vaca y cabra llegándose a evaluar experimentalmente, el valor nutritivo de ambas, considerando la importancia del consumo de productos lácteos en España, con una ingesta media total de 384 gramos diarios por persona, que según la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) es el grupo principal de alimentos consumidos en la dieta actual de la población.

La investigación tecnológica de estos proyectos de I+D se realizó en las instalaciones de la Planta Piloto de Lácteos y el centro Alameda del Obispo (Córdoba), pertenecientes al Instituto de Investigación y Formación Agraria, Pesquera y de la Producción Ecológica (IFAPA), bajo la coordinación del Dr. José Luis Ares.



Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

2-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

La cabra parece que fue uno de los primeros animales que domesticó el ser humano, siendo la leche y los productos lácteos importantes fuentes alimentarias en las antiguas civilizaciones. Los rebaños caprinos se extendieron por todo el mundo debido a su fácil adaptación a los más variados climas, ocupando el área de distribución más amplia entre los animales domésticos. Su talla pequeña, pocas exigencias, facilidad de movimiento para cosechar su dieta, docilidad y elevada producción, parecen haber favorecido su rápida expansión convirtiéndose en un animal muy apreciado en la antigüedad, como lo demuestra su relevante presencia en las numerosas pinturas y tallas de arte rupestre encontradas hasta la fecha.

Algunas de las cualidades de este animal están resumidas por Salvador de Rueda en su soneto "La cabra", y en cuya última estrofa dice:
"Rumia floridas hierbas con músicas de enjambres,
y de ese ser formado de trémulos alambres,
brotan para los hombres las fuentes de la vida".

La leche de cabra ha sido un componente esencial de la "dieta mediterránea" en sus orígenes, especialmente mediante su transformación quesera, como señalan los autores clásicos, entre ellos, Catón, Virgilio, Columela, Plinio, y Ateneo, describiendo no sólo el modo de hacer el queso, sino los tipos que existían antiguamente ("oxigala", "moretum"), o incluso algunas especialidades culinarias como un pastel ("sabilium") a base de queso, miel, harina y huevos, espolvoreado con semillas de amapolas y cocido al horno. Asimismo, se conocía la leche fermentada, considerada en el Deuteronomio como "uno de los alimentos dado por Jehová a su pueblo".

Ya en nuestro siglo, al finalizar la segunda guerra mundial, el gobierno griego encargó a la norteamericana 'Fundación Rockefeller' un estudio sobre las características socioeconómicas, sanitarias, demográficas, y dietéticas de la población de la isla de Creta, encontrando que su dieta básica estaba formada por cereales, legumbres, verduras, frutas, pescado, leche y queso de cabra, cantidades moderadas de carne, así como vino, aceite de oliva y aceitunas. Esta población, de estatus económico y nivel educacional muy bajos en comparación con los países industriales, no obstante, presentaba paradójicamente, las tasas de enfermedades crónicas más bajas del mundo y una esperanza de vida de las más elevadas.

Este trascendental trabajo se puede considerar como el antecedente del famoso estudio de los "siete paises" de Ancel Keys (1980 y 1995), que pone de manifiesto las implicaciones sobre la salud de la dieta mediterránea, donde la leche de cabra o su queso estaban siempre presentes. Desde aquellas épocas clásicas a la actualidad, la cabra ha tenido un papel primordial en la producción de alimentos de calidad para el ser humano, especialmente en las regiones desfavorecidas del mundo, donde todavía dichos alimentos constituyen la principal fuente de proteína para la población. Igualmente en el otro extremo de la agricultura, en los países económicamente más desarrollados se ha seleccionado a la especie caprina para aumentar su producción de leche, como lo demuestra el hecho de que el censo de cabras de la Unión Europea, Estados Unidos e Israel, no alcance el 5% del total y, sin embargo, su producción lechera supera el 27% de la mundial.



Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

1-LECHE DE CABRA: NUTRICIÓN Y SALUD

A continuación, se expone un interesante trabajo sobre las características cualitativas y saludables de la leche de cabra, redactado por los doctores Julio Boza López y María Remedios Sanz Sampelayo, prestigiosos científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y que durante varias décadas han estudiado con profundidad la alimentación, y fisiología de esta especie rumiante en las instalaciones de la Estación Experimental del Zaidín (Granada, España). así como sus efectos en la calidad de la leche y los productos lácteos caprinos. En este campo he tenido la inmensa suerte de colaborar con ellos y su excelente equipo humano, en varios proyectos de investigación, adquiriendo la mayor parte de mis conocimientos sobre la especie caprina, por lo que los considero mis maestros.  

Dada la extensión de este trabajo, y para facilitar su lectura, se presenta divido en distintos bloques temáticos, comenzando en este primer apartado con una breve Introducción al tema objeto de estudio. 

En este sentido cabe destacar que la "calidad" de cualquier alimento destinado al consumo humano, depende en gran medida de su posible contribución al mantenimiento energético del organismo y a su aporte equilibrado de los nutrientes necesarios. o incluso a la mejora de la salud por sus efectos preventivos o curativos de determinadas enfermedades. En las últimas dos décadas han cobrado fuerza los llamados "alimentos funcionales", los "productos nutracéuticos", y los "farmalimentos", con una composición modificada o con la incorporación de algunas sustancias consideradas como saludables, que además de sus características nutricionales poseen la capacidad de aportar efectos beneficiosos para nuestra salud. En paralelo al avance de los conocimientos científicos en este campo, la industria alimentaria está elaborando nuevos "alimentos de diseño", que sacan al mercado con fuertes campañas publicitarias enfatizando sus potenciales propiedades saludables, incluso para determinados grupos concretos de la población. 

Por otra parte, diversos informes sectoriales y trabajos científicos muestran un creciente interés por la especie caprina y sus producciones lácteas en los países de mayor nivel de desarrollo, incluyendo aquellos con escasa tradición ganadera debido, en gran medida, a la difusión de las propiedades nutricionales y saludables de la leche de cabra y sus productos derivados. Esta tendencia, junto a la buena adaptabilidad de la cabra a los diferentes climas y territorios, incluidas las zonas de menores recursos naturales consideradas marginales o desfavorecidas, han impulsado el incremento del número de explotaciones caprinas orientadas a la producción láctea, con el consiguiente aumento en el censo de animales y en el volumen total de leche producida, que han alcanzado cifras muy significativas en muchos países.

Analizando las estadísticas oficiales de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) se puede apreciar el importante crecimiento del sector caprino a nivel mundial, con un incremento del censo desde los 456 millones de animales en 1979-81, a los 609 millones en 1994, registrándose un fuerte aumento en la producción de leche, de las 7,78 millones de toneladas en 1979-81, a las 10,48 millones de toneladas en I994 (FAO, 1995). En ese mismo período las cifras en España mostraban también la pujanza del sector caprino lechero, con un censo de 3.157.277 cabezas a nivel nacional, siendo de 1.304.713 animales la cabaña andaluza, lo que representaba el 41,3% del total; también se alcanzaron cifras importantes en la producción de leche de cabra, con un volumen total de 376,7 millones de litros en el año 1996, de los cuales 209,9 millones se produjeron en Andalucía, lo que representa el 55,7% del total nacional, siendo esta región la primera productora en el conjunto de España. Estas cifras indican claramente la aptitud lechera de las principales razas autóctonas andaluzas, destacando la zona de Andalucía Oriental, con 135,2 millones de litros, que representan el 64,4% de la producción total de leche de cabra de la región andaluza, y el 35,6% del volumen nacional (MAPA, 1996; IEA,1996).

Las estadísticas oficiales del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, para el año 2013, muestran un censo caprino total de 2.609.989 animales, claramente inferior a las citadas anteriormente, de los cuales se clasifican como 'chivos' y 'sementales' 423.991 y 86.589 cabezas, respectivamente. El censo total de 'hembras para vida' es de 2.099.409 cabezas; las cifras de 'cabras ya paridas' registran un total de 1.083.750 y de 586.302 animales en ordeño y no ordeñadas, respectivamente; mientras que las 'hembras nunca paridas' aparecen desglosadas en 163.626 de 'hembras no cubiertas' y 265.731 de 'hembras cubiertas por primera vez' (MAGRAMA, 2014).

En Andalucía, las estadísticas oficiales indican, para el año 2013, un censo caprino total de 946.106 cabezas, que representa el 36,2% del total nacional, lo que supone un descenso porcentual de 5,1 respecto al período analizado anteriormente; las cifras para las categorías de 'chivos' y 'sementales' son de 203.029 y 30.021 cabezas, respectivamente. En relación con las 'hembras para vida' el censo andaluz registra un total de 713.056 cabezas, clasificadas 'hembras ya paridas' 430.800 animales en ordeño, y 96.862 no ordeñadas; mientras que las 'hembras nunca paridas' agrupan a 35.654 y 149.740 hembras no cubiertas y cubiertas por primera vez, respectivamente.

Durante el período 2000-2012, según las estadísticas oficiales de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, se registra una importante disminución en la producción de leche de cabra en Andalucía, desde un total de 244.073 miles de litros (año 2000) hasta 183.781 miles de litros (año 2012). Este descenso fue debido principalmente al cierre de numerosas explotaciones caprinas de mínima o nula rentabilidad, afectadas seriamente por los altos costes de los insumos (alimentación, energía, salarios) y los bajos precios de venta de la leche, con un elevado grado de concentración de las compras por parte de los principales operadores del mercado lácteo.

En la actualidad, la creciente demanda de leche de cabra por parte de las grandes industrias queseras, principalmente de los países vecinos y la menor oferta local ha presionado al alza a los precios de venta de leche de esta especie animal. Lo que falta por saber es cuánto va durar este ciclo de "bonanza" para los productores del sector caprino.


Fuente: "Aspectos nutricionales de la leche de cabra" (Dres. J. Boza López y M. R. Sanz Sampelayo, pág. 109-139).
Circular informativa (2014). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

miércoles, 7 de mayo de 2014

PUBLICACIÓN: ACTA CONGRESO 2013-4 LA RIOJA (ARGENTINA)

Congreso/Simposio: I CONGRESO ARGENTINO DE PRODUCCIÓN CAPRINA: CALIDAD, PRODUCTIVIDAD, DESARROLLO Y COMPROMISO.
Temática: Producción animal, Ganado caprino, Desarrollo y compromiso sectorial, Producción lechera, Producción cárnica, Otras producciones, Calidad de los productos caprinos, Productividad, Procesos de Transformación e industrialización, Control de Calidad, Comercialización.
Claves: sector ganadero, caprino, productos lácteos, leche de cabra, leche de vaca, composición, calidad, trastornos de salud, alimentos de sustitución, Argentina, España.
Contribución: comunicación oral.
Ámbito: internacional.
Título del trabajo: La leche caprina como sustituto de la leche de vaca.
Contenidos: Resumen, Introducción, Desarrollo temático, Conclusión, Bibliografía.
Ilustraciones: Gráficos, figuras, tablas.
Autoría: González, C.; Iriarte, M.; Rey, A.M.; Ares, J.L
Organización del evento: Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina/ Gobierno de la Provincia de la Rioja (Argentina)/ Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Lugar de celebración: La Rioja (Argentina).
Fecha: 28-30/08/2013.
Publicación: Memorias del Primer Congreso Argentino de Producción Caprina, Serie: Estudios sobre el Ambiente y el Territorio, nº 9, 2013, 290-294.
Idioma: español.



Fuente: Circular informativa (2013). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). María Jesús Jiménez Horwitz (presidenta). Sede AQAA: Jayena (Granada, España)

miércoles, 5 de marzo de 2014

7-INVESTIGACIÓN ECOLÓGICA CABRA MURCIANO-GRANADINA: CONCLUSIONES ESTUDIO COMPARATIVO EN GRANADA (ESPAÑA)

A continuación, se exponen las principales Conclusiones obtenidas en el trabajo de investigación titulado "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)", realizado por R. García Trujillo e I. Vert, y presentado en el VII Congreso SEAE (Zaragoza, 2006).

En este sentido, a modo de conclusión general, se puede afirmar que los sistemas productivos semi-extensivos y semi-intensivos estudiados en este trabajo de investigación, pueden transformarse en sistemas ecológicos, siempre que sea factible certificar las áreas de pastoreo, y corregir la suplementación alimentaria del ganado en el segundo caso.

Desde el punto de vista económico y sin cambiar los parámetros de los tres sistemas productivos abordados en los citados 'estudios de caso', el paso a la producción ecológica en el sistema semi-extensivo, considerando un incremento del coste de los alimentos en un 20%, puede significar un aumento del 7% en los ingresos por cabra reproductora, siempre que se mantuvieran los precios de venta actuales. Y en el caso de que únicamente se incrementasen en un 10%, se generaría un aumento en los ingresos netos familiares que podría ser de hasta un 20%, siendo superior en un 8% al sistema intensivo estabulado.

Más información: VII Congreso SEAE (2006), nº 24. "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)". Autores: R. García Trujillo, I. Vert.  Zaragoza (España).



Fuente: Circular informativa (2006). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). Manuel Peña Párraga (presidente). Sede AQAA: Baena (Córdoba, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

6-INVESTIGACIÓN ECOLÓGICA CABRA MURCIANO-GRANADINA: RESULTADOS DEL ESTUDIO ECONÓMICO COMPARATIVO EN GRANADA (ESPAÑA)

A continuación, se exponen los principales Resultados del estudio económico comparativo de los sistemas productivos de las explotaciones caprinas estudiadas, obtenidos en el trabajo de investigación titulado "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)", realizado por R. García Trujillo e I. Vert, y presentado en el VII Congreso SEAE (Zaragoza, 2006).

Los resultados del estudio económico ponen de manifiesto que los tres sistemas productivos estudiados, no responden a la media de los obtenidos para cada sistema, dado que las explotaciones caprinas seleccionadas en este trabajo de investigación, presentan un manejo adecuado por parte de sus propietarios y además, en las mismas, se desarrollan estrategias singulares, lo cual permite atenuar la incidencia del 'factor ganadero', que en muchos casos se revela más importante que el propio sistema productivo.

En la Tabla 3, que se presenta a continuación, se recogen los datos del balance económico de los tres sistemas productivos estudiados (en €/reproductora/año). Analizando los gastos incurridos, en el sistema semi-extensivo fueron un 48% menores que en los sistemas intensivos, siendo esta diferencia debida básicamente a los costes de alimentación.

El sistema intensivo, estabulado, presentó también un alto gasto por amortización y mano de obra asalariada, en relación a los otros dos sistemas productivos analizados, destacándose que en el sistema semi-intensivo, la alta producción de leche obtenida (596 kg/cabra) estuvo relacionada con el alto gasto en alimentación, especialmente en el suministro de concentrado a los animales, que ascendió a 369 kg/reproductora/año (calculado dividiendo todo el concentrado gastado incluyendo el suministrado a los animales jóvenes, reposiciones y sementales, entre el número total de cabras reproductoras), mientras que el intensivo fue de 247 kg/año y en el semi-extensivo 136 kg/año.

Por otra parte, los ingresos fueron similares en los sistemas intensivos, siendo superiores ambos en un 48% al sistema semi-extensivo. La estructura de los ingresos también fue diferente, pues mientras en los sistemas intensivos la producción de leche representó alrededor del 64% de los ingresos, en el semi-extensivo fue el 40%, sin embargo, la venta de animales tanto para vida como para sacrificio representó en este sistema el 51% de los ingresos totales, mientras que en los sistemas intensivos esta producción solo supuso alrededor del 24% de los ingresos.

No cabe duda de que en los sistemas semi-extensivos se han desarrollado estrategias de producción que si bien pueden tener una inferior producción de leche que los sistemas intensivos, el menor coste en que incurren dan como resultado que el beneficio económico sea similar a los intensivos aunque, las lactancias analizadas en este trabajo señalan que, a nivel poblacional no hay diferencias en producción de leche entre los sistemas productivos semi-extensivos y los semi-intensivos, o inclusive aquellas pueden llegar a ser superiores.

La diferencia básica en estos dos sistemas medios se basa en la cantidad de alimentos concentrados que reciben las cabras como suplemento, pues por lo general ambos emplean el pastoreo y el uso de otros recursos forrajeros de su zona. Esto significa que en términos poblacionales, el suplemento concentrado en el sistema semi-intensivo está sustituyendo, en parte, a los recursos forrajeros, ya sea por decisiones de manejo del propio ganadero o por escasez, sin que esto revierta en una mayor producción de leche, aunque en términos generales la variación de la producción de leche de las cabras viene determinada, aproximadamente, en un 50% por la cantidad de alimento concentrado suministrado, según análisis de trece rebaños de la población estudiada por García-Trujillo y colaboradores (2005).

También hay que destacar la gran dependencia exterior que tienen los sistemas intensivos estabulados y los semi-intensivos que emplean una gran cantidad de alimentos concentrados, lo cual los hace muy vulnerables a los cambios de los precios de las materias primas en el mercado, condicionado especialmente por el precio internacional del petróleo. En este sentido, los resultados obtenidos en un estudio previo sobre la evaluación de la sustentabilidad, donde se incluía los tres 'estudios de caso' analizados en este trabajo, arrojó que el sistema semi-extensivo dependía de las fuentes de recursos no renovables en un 40%, mientras que el intensivo estabulado dependía en un 89%, y el semi-intensivo en un 53% (García Trujillo, 2004). 

En dicho estudio, la sustentabilidad de estos sistemas productivos, medida por el método de la Emergía en una escala de 0 a 6, arrojó que mientras que el sistema semi-extensivo presentaba una sustentabilidad de 3,85, por el contrario, en el intensivo estabulado era solo de 0,14 y de 1,83 en el semi-intensivo.



Fuente: Circular informativa (2006). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). Manuel Peña Párraga (presidente). Sede AQAA: Baena (Córdoba, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

5-INVESTIGACIÓN ECOLÓGICA CABRA MURCIANO-GRANADINA: RESULTADOS SEGÚN PRODUCCIÓN Y COMPOSICIÓN DE LA LECHE EN GRANADA (ESPAÑA)

A continuación, se exponen los principales Resultados sobre la influencia del sistema productivo sobre la producción y composición de la leche de cabra, obtenidos en el trabajo de investigación titulado "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)", realizado por R. García Trujillo e I. Vert, y presentado en el VII Congreso SEAE (Zaragoza, 2006).

En las explotaciones caprinas estudiadas en este trabajo de investigación se encontraron diferencias significativas (p≤0,001) en la cantidad de leche producida en los diferentes sistemas productivos. Así, el sistema intensivo fue el de mayor producción y el extensivo el de menor, sin embargo, el sistema semi-extensivo presentó una producción media diaria de leche superior al semi-intensivo y las diferencias con el intensivo fueron únicamente de 0,26 kg de leche/día. 

Esta misma tendencia se ha constatado para la producción de leche por lactación, y por lactación estandarizada, aunque en estos dos parámetros no se encontraron diferencias significativas entre los sistemas semi-extensivo y semi-intensivo. En la Tabla 2 se muestran los resultados de la influencia del sistema productivo sobre la producción y composición de la leche de cabra, expresados en valores medios de cada variable para cada sistema estudiado, teniendo en cuenta que los superíndices diferentes en una misma columna de esta tabla indican diferencias significativas entre valores de la misma columna (p≤0,001).

Por otra parte, se ha puesto de manifiesto que para la producción de leche por lactación y lactación normalizada, la producción de los sistema semi-extensivo fue el 80%, y el 84% de la del sistema extensivo, respectivamente. La duración de la lactación, fue significativamente menor (p≤0,001) en los sistemas intermedios, que no difieren entre sí, siendo paradójico que tampoco difiriera en los sistemas extremos (extensivo e intensivo).

En cuanto a la composición de la leche se ha constatado que también estaba influenciada por el tipo de sistema productivo. El contenido de grasa de la leche fue significativamente superior (p≤0,001) en el sistema extensivo en relación a los dos sistemas intensivos, pero no difirió del semi-extensivo. Este último no difirió significativamente de los sistemas intensivos (Tabla 2). Esta tendencia se explica por el efecto negativo de la cantidad de leche sobre sus componentes principales, así como el mayor número de lactaciones de las cabras. 

Respecto al contenido de proteína, la tendencia fue similar, pero en este parámetro el sistema extensivo mostró diferencias significativas con todos los sistemas productivos estudiados, seguido por el sistema semi-extensivo, siendo los sistemas intensivos los de menor contenido proteico, no difiriendo entre si. 

Asimismo, los sólidos totales de la leche no mostraron diferencias importantes entre sistemas productivos, aunque debido a la alta dispersión de los datos, el análisis estadístico dio resultados contradictorios. Considerando la producción total de grasa y de proteína de la leche en base a la lactancia total, el sistema intensivo registra la mayor producción (37,14 kg), seguido de los sistemas semi-extensivo (31,42 kg), semi-intensivo (29,85 kg), y el extensivo (21,24 kg).



Fuente: Circular informativa (2006). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). Manuel Peña Párraga (presidente). Sede AQAA: Baena (Córdoba, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)

lunes, 3 de marzo de 2014

3-INVESTIGACIÓN ECOLÓGICA CABRA MURCIANO-GRANADINA: METODOLOGÍA ESTUDIO DE SISTEMAS DE PRODUCCIÓN EN GRANADA (ESPAÑA)

A continuación, se expone la Metodología utilizada en el trabajo de investigación titulado "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)", realizado por R. García Trujillo e I. Vert, y presentado en el VII Congreso SEAE (Zaragoza, 2006).

Para analizar el efecto del sistema de producción y calidad de la leche de cabra sobre los resultados productivos y económicos de los rebaños caprinos lecheros de la raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada, se realizaron dos tipos de estudios; en el primero se estudiaron 22.440 lactaciones de 27 ganaderías correspondientes al período 1999-2004, controladas por la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Caprino de raza Murciano- Granadina, que fueron clasificadas por sistema productivo, y en el segundo trabajo, se escogieron tres explotaciones caprinas bien manejadas, que representaban a los principales sistemas productivos, y se sometieron específicamente a un 'estudio de caso' mediante entrevista semi-estructurada a los ganaderos, cuya información se utilizó para hacer un análisis económico.

Los sistemas productivos se clasificaron en extensivos, semiextensivos, semiintensivos e intensivos, empleando para ello, varios criterios, donde la carga ganadera y el nivel de concentrado suministrado en la dieta alimentaria de los animales tuvieron el mayor peso, comprobando a posteriori que esta clasificación diferenciaba de forma significativa a todos los sistemas estudiados. Los datos productivos y las lactaciones se analizaron empleando el paquete estadístico SPSS 12 para Windows. A continuación, se presenta la clasificación de las explotaciones ganaderas en función del sistema de producción.

1-Sistema extensivo:
-Carga ganadera (1): ≤1,5
-Suministro de concentrado (3): ≤ 80
-Lactancia de la cría: natural
-Orientación productiva: leche-carne
-Código: 1

2-Sistema semi-extensivo:
-Carga ganadera (1): ≤3,0
-Suministro de concentrado (3): ≤ 150
-Lactancia de la cría: natural
-Orientación productiva: leche-carne
-Código: 2

3-Sistema semi-intensivo:
-Carga ganadera (1): ≤6,0
-Suministro de concentrado (3): > 150
-Lactancia de la cría: artificial-natural
-Orientación productiva: leche
-Código: 3

4-Sistema intensivo (2):
-Carga ganadera (1): ≥6
-Suministro de concentrado (3):  > 150
-Lactancia de la cría: artificial
-Orientación productiva: leche
-Código: 4

A continuación, se detallan las observaciones enumeradas:
(1) Número de cabras por hectárea.
(2) Para los sistemas estabulados se les asignó el valor diez para poder representar la gráfica.
(3) Kilogramos de concentrado suministrado por cabra y año.

Para realizar el estudio técnico-económico se seleccionaron tres explotaciones caprinas en los distintos sistemas productivos, teniendo en cuenta que, en muchas ocasiones, las diferencias entre éstas, debido a las distintas rutinas en el manejo de los rebaños, son superiores a las que se registran entre grupos o sistemas.

En este sentido, se seleccionaron tres explotaciones con un buen manejo perteneciente a los sistemas semi-extensivos, semi-intensivo y uno intensivo estabulado, realizándose un estudio detallado de la tecnología empleada, y de los medios e insumos, lo cual permitió realizar un análisis económico de cada explotación. Así, en el caso de la explotación semi-extensiva, el rebaño de 160 cabras del tronco granadino aprovechaba, mediante pastoreo, los recursos naturales y residuos de una zona de campiña en la localidad de Huétor Tájar, obteniendo una producción lechera media de 231 kg de leche por animal; sin embargo, esta explotación se clasificó como de 'doble propósito' por el peso que se le daba a la producción de cabritos, con amamantamiento natural, destinados a la venta.

La explotación semi-intensiva está integrada por un rebaño de 90 cabras, con una alta producción de leche (596 kg/ cabra), aprovechando mediante el pastoreo una amplia zona (unas 1.000 hectáreas), comprendida desde la localidad de Iznalloz hasta Sierra Arana; no obstante, se suministra a estos animales una gran cantidad de alimento concentrado (369 kg/cabra/año), y además, durante los primeros meses de la lactación las cabras pastan en áreas cercanas a las instalaciones de la explotación ganadera.

La explotación intensiva estabulada se encuentra en la localidad de Dehesa Vieja, integrada por un rebaño de 300 cabras de la raza Murciano-Granadina con crianza artificial, y no existen áreas para la producción de alimentos; se alcanzan unas producciones por cabra de 555 kg de leche/ lactación.

Finalmente, para realizar el estudio económico se tuvieron en cuenta los gastos de salarios de las personas no pertenecientes a la familia propietaria de la explotación ganadera, así como los diversos insumos, impuestos, amortizaciones, y los ingresos por producción y las ayudas públicas percibidas.

Más información: VII Congreso SEAE (2006), nº 24. "Posibilidades de implantación de sistemas de producción ecológicos de leche de cabra de raza Murciano-Granadina en la provincia de Granada (España)". Autores: R. García Trujillo, I. Vert.  Zaragoza (España).



Fuente: Circular informativa (2006). Asociación de Queseros Artesanos de Andalucía (AQAA). Manuel Peña Párraga (presidente). Sede AQAA: Baena (Córdoba, España).
José Luis Ares Cea (asesor científico)