viernes, 25 de enero de 2013

2-INNOVACIÓN, PRIORIDAD SECTOR LÁCTEO

Durante los últimos años se ha producido una importante diversificación en las estrategias de producción de las grandes industrias lácteas europeas, incluyendo entre ellas algunas empresas españolas del sector, especialmente aquellas que cuentan con potentes y dinámicos departamentos de I+D y Marketing.

Estas nuevas estrategias pretenden dar respuesta a los cambios de las demandas del mercado con el lanzamiento de productos nuevos o innovadores de mayor valor añadido, en base a la incorporación de los últimos avances en el campo del conocimiento: ciencia-tecnología-empresa generados por el sistema de Investigación-Desarrollo-Innovación (I+D+i).

Por otra parte, el número de consumidores preocupados por los efectos beneficiosos de ciertos alimentos sobre la salud aumenta cada día, principalmente de aquellos que consideran a la dieta alimentaria no como una necesidad meramente nutricional del organismo humano sino como una fuente de bienestar al reducir el riesgo de padecer determinadas enfermedades y contribuir a mejorar la calidad de vida. En este sentido, se han producido notables avances científicos en el campo alimentario durante las últimas décadas, entre ellos hay que destacar la aparición de los denominados alimentos “funcionales” o “nutracéuticos”, que contienen algunos componentes específicos con efectos beneficiosos para el organismo humano.

Actualmente existe una gran diversidad de alimentos funcionales en el mercado, cuya aprobación por parte de las autoridades sanitarias requiere de unas investigaciones científicas previas donde, además de sus efectos nutricionales característicos, se demuestren claramente sus propiedades beneficiosas para los consumidores, bien por mejorar su estado de salud o bien por reducir el riesgo de padecer alguna enfermedad.

Algunos alimentos funcionales se emplean con éxito en la lucha contra determinadas alteraciones de la salud, como ocurre con los enriquecidos en calcio en el caso de la osteoporosis, los suplementos de fibra para el estreñimiento, la adición de ácidos grasos omega-3 (poliinsaturados de la serie n-3) en las patologías cardiovasculares, o las bacterias lácticas en el equilibrio de la microflora intestinal. En este último caso, hay que mencionar el gran desarrollo experimentado por los alimentos funcionales llamados “probióticos” durante los últimos años, constituidos por microorganismos capaces de modificar positivamente el equilibrio de la flora intestinal y de tener diversos efectos saludables en el organismo humano. Algunos géneros de los microorganismos probióticos más utilizados en alimentación son Lactobacillus, Bifidobacterium, y Lactococcus.


José Luis Ares Cea (conferenciante)