martes, 25 de junio de 2013

MATERIAL DIDÁCTICO: AVANCES CIENTÍFICOS Y SU DIFUSIÓN EN LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

Que el avance de la ciencia y las innovaciones tecnológicas son continuos salta a la vista, no hay más que ver, escuchar y leer los distintos medios de comunicación, pero cuál es su verdadera dimensión y sus repercusiones prácticas en la sociedad ya es otro asunto diferente. Hay que reconocer que, en cualquier especialidad o sector, un avance científico deficientemente explicado no sólo genera confusión entre los ciudadanos, sino que además puede ser contraproducente por sus posibles interpretaciones negativas, llegando incluso, en algunos casos, a provocar casos de "alarma" social. 

Si tomamos como ejemplo lo ocurrido durante las últimas décadas dentro del campo de los avances científicos en la 'ingeniería genética' y sus aplicaciones en los seres vivos, entre ellos, las plantas y los animales, que a su vez son fuentes principales de alimentos para la especie humana, podemos comprobar el constante "bombardeo" masivo de noticias en los medios de comunicación, y los continuados errores explicativos de tales descubrimientos e innovaciones, extendiéndose incluso a los estratos sociales más cualificados. En el caso concreto del sector agroalimentario los avances de la ingeniería genética han sido espectaculares, desde la producciones primarias (materias primas agrícolas y ganaderas) hasta los distintos procesos de transformación y conservación de los alimentos elaborados por las industrias agrarias, y destinados al mercado consumidor.   

Parece evidente de que una persona emprendedora dentro del sector lácteo, no tiene porqué conocer al detalle los múltiples avances científicos que se generan cada día en su ámbito productivo, debido a la pequeña dimensión de su empresa o por disponer de técnicos que se encargan de esos temas específicos, pero, sin embargo, resulta de gran utilidad tener una información correcta antes de tomar cualquier decisión que requiera un conocimiento previo sobre dicha innovación o descubrimiento. Cuando se comenta hasta la extenuación los últimos avances de la ingeniería genética, muchas personas desconocen el significado de este campo del conocimiento, simplemente porque no saben los que son los "genes". Respecto a este punto, parece de sentido común, que para la divulgación de una noticia sobre un determinado avance en el campo de la ingeniería genética, se defina al menos, de modo muy simple, qué son los genes, para que el receptor de la información pueda comprender mejor el alcance de dicho avance y su posible aplicación o no en su propia empresa.

A continuación, sin ser un experto en este campo científico, me atreveré a realizar un ejercicio de divulgación sobre algunos de los avances más conocidos en la materia, para facilitar la comprensión de los receptores de diversas noticias específicas aparecidas en los distintos medios de comunicación. Creo que se podría comenzar diciendo que al igual que todos los seres vivos los humanos tenemos 'genes', que se definen como la "unidad de almacenamiento de la información genética, siendo además la unidad de la herencia, ya que transmite esta información a la descendencia". Estos genes se encuentran localizados en los cromosomas en el núcleo de las células de los seres vivos, denominándose 'genoma' al "conjunto de los genes de una especie", siendo la 'genética' la "ciencia que estudia los genes".

En el siglo XIX Gregor Mendel, fraile agustino, nacido en 1822 en territorio del Imperio austrohúngaro, realizó distintos experimentos con plantas ('hibridaciones'), logrando tipificar las características fenotípicas (apariencia externa) de las variedades de guisantes (arvejas), mediante cruzamientos de semillas, y cuyos resultados revelaron la existencia de 'caracteres dominantes' que determinaban el efecto de un gen, y otros los 'recesivos' que no tenían expresión genética. Asimismo, utilizó el nombre de 'elemento' para referirse a las entidades hereditarias separadas. Estos descubrimentos son conocidos en la actualidad como las 'leyes de Mendel' que rigen la 'herencia' genética en los seres vivos. Los 'caracteres' y 'elementos' definidos por Mendel son hoy denominados universalmente con el nombre de 'genes', siendo el 'genotipo' la parte transmitida de una generación a la siguiente.

Otro enorme avance científico en este campo fue el descubrimiento del 'código genético', a principios de los años sesenta, y su posterior "descifrado" por parte de distintos investigadores; en la especie humana este código es el mismo para todos los individuos, aunque en los medios de comunicación se suele utilizar de modo incorrecto como sinónimo de genoma, genotipo, o ácido desoxirribonucleico (ADN). Este último contiene instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y funcionamiento de todos los organismos vivos conocidos y algunos virus, y es responsable de su transmisión hereditaria. En este sentido, la 'ingeniería genética' utiliza técnicas para aislar segmentos del ADN (material genético) para introducirlos en el genoma (material hereditario) de otro individuo. Entre los avances en este campo, se pueden mencionar la utilización de materiales procedentes de distintos reinos y especies presentes en la naturaleza, como por ejemplo, genes de animales en plantas.

El 'Proyecto del Genoma Humano' ha permitido el descifrado completo del genoma en la especie humana, hace poco tiempo, descubriendo que tenemos un total de 20 mil genes. Más recientemente, investigadores de la Universidad de Toronto (Canadá) han descubierto el código de 'corte y empalme', que es una especie de nuevo 'código dentro del código'. Por otra parte, conviene recordar que la reproducción de los seres vivos en la naturaleza puede ser 'asexual' o 'sexual', por ejemplo, muchas plantas y hongos se reproducen asexualmente; en cambio, mediante la reproducción sexual no se pueden obtener 'copias idénticas' de un organismo, ya que este proceso genera 'diversidad'.

En cuanto a la posibilidad de tener 'réplicas' exactas de un ser vivo, se han producido enormes avances científicos en las últimas dos décadas, entre ellos, la famosa 'clonación', nombre que viene del griego y significa 'retoño', 'rama', proceso que permite conseguir de forma asexual copias idénticas de un organismo, célula o molécula ya desarrollados. En este sentido, una noticia que dio la vuelta al mundo en 1996 fue la famosa "oveja Dolly", de raza Finn Dorset, que fue el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta, debido al trabajo de un grupo de científicos del Instituto Roslin de Edimburgo (Escocia). Entonces, cabría plantear la pregunta ¿es posible la clonación en células humanas?. La respuesta es afirmativa, lo que ocurre es que en la actualidad la clonación de seres humanos está absolutamente prohibida.

Pero si observamos los enormes avances científicos en materia de ingeniería genética en plantas y animales durante los últimos años, y su aplicación en la producción agroalimentaria destinada al consumo humano, como ocurre con los denominados 'organismos genéticamente modificados', generalmente conocidos por sus siglas (OGM, OMG, o del inglés GMO), muy presentes en los principales países productores de materias primas agrarias, y cuyos volúmenes de exportaciones crecen ininterrumpidamente, constatamos fácilmernte que esta situación es ya una realidad a nivel mundial. El material de estos OGM ha sido 'modificado' mediante técnicas de ingeniería genética, y su modo de obtención es diferente al apareamiento o la recombinación que se dan en la naturaleza. Una de las características de estos organismos es que son incapaces de reproducirse o de transferir material genético, incluidas las entidades microbiológicas (celulares o no).

Los denominados 'organismos transgénicos', de gran repercusión mediática en los últimos años, son un caso particular de OMG, a los que se les ha 'introducido en su genoma', uno o varios genes procedentes de una especie diferente. Son numerosos los avances científicos en la obtención de animales transgénicos, como por ejemplo, las vacas modificadas genéticamente para producir leche humana. Aunque en los países de la Unión Europea, existen actualmente fuertes controversias sobre la conveniencia o no de la creación, uso y comercialización de transgénicos destinados a los seres humanos, especialmente, desde el punto de vista de la seguridad alimentaria y la protección de la salud de los consumidores y, sin entrar en estas cuestiones, que requieren de estudios científicos muy amplios y la intervención de equipos de investigación multisciplinarios, no podemos dejar de interrogarnos sobre la posibilidad de que en algún momento se aplicasen dichos avances genéticos para la 'mejora de los seres humanos' y de sus propias capacidades y aptitudes.

Haciendo un poco de ciencia-ficción sobre las aplicaciones de estos avances científicos en los seres humanos, podemos preguntarnos, qué ocurriría si se clonasen los mejores emprendedores del mundo y se pudiesen distribuir, estratégicamente, sus múltiples réplicas o copias idénticas, con sus grandes virtudes empresariales y escasísimos defectos, en aquellas zonas geográficas menos "agraciadas" por la naturaleza. Da pavor solo de pensar de que esta posibilidad pudiese llevarse a la práctica, sin embargo, los avances científicos son imparables, y no conocen fronteras ni normativas, es decir, ¿quién le pone las puertas al campo?.

A modo de reflexión final, y dado que de momento esta posibilidad no se vislumbra en el horizonte cercano, lo que nos tranquiliza bastante, habrá que seguir transitando por los caminos convencionales de la formación y la incentivación de los emprendedores mediante programas de asesoramiento y asistencia técnica, sin olvidar, las necesarias ayudas económicas y las líneas de financiación específicas para poder dearrollar sus proyectos empresariales con mejores perspectivas de éxito. Si bien algunos expertos insisten en que los "emprendedores nacen y no se hacen", poniendo en evidencia de alguna manera que esta conducta o habilidad tiene un componente más genético que ambiental, no obstante, las experiencias reales de muchas escuelas de negocios y viveros de empresas demuestran que una formación adecuada puede ayudar bastante en el equilibrio de la balanza de ambos componentes. En este sentido, y para finalizar esta reflexión vamos a quedarnos con la frase de que "los emprendedores lácteos no se clonan, al menos de momento....".

Este artículo se incorpora como información complementaria (foro de análisis y debate) al material didáctico que he elaborado para el alumnado del curso de Especialista en Quesería, impartido durante 2013 en las instalaciones de la Planta Piloto de Lácteos.


Fuente: Material didáctico (2013). Planta Piloto de Lácteos de Hinojosa del Duque (Córdoba, España).
José Luis Ares Cea (profesor)