miércoles, 13 de mayo de 2015

INVESTIGACIÓN: ESTUDIO DE SCRAPIE OVINO (ESPAÑA)

En un trabajo de investigación se ha realizado un estudio histopatológico de los casos de Scrapie ovino en explotaciones de Castilla y León (España) durante el período 2000-2005.

El Scrapie (Tembladera o Prurigo Lumbar) es una enfermedad neurodegenerativa transmisible, crónica y fatal que afecta al ganado ovino y caprino, y está incluida dentro del grupo de las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles (EET). Las primeras descripciones de manifestaciones clínicas de esta enfermedad datan del siglo XVIII. Actualmente el Scrapie se distribuye por todos los países con cabaña ovina, excepto en Australia y Nueva Zelanda, donde se ha erradicado gracias a las estrictas medidas de control sanitario. En España existen referencias de esta enfermedad desde 1987. El diagnóstico del Scrapie se basa en el estudio histopatológico ya que no se observan lesiones macroscópicas significativas. Las alteraciones microscópicas se caracterizan por una degeneración vacuolar bilateral, tanto del cuerpo neuronal como del neuropilo. Otra característica de este proceso nervioso es su estrecha relación con el genotipo del hospedador, estableciéndose 15 genotipos diferentes, agrupados en cinco grados según la susceptibilidad al desarrollo del mismo. La clínica que se desarrolla en el Scrapie es insidiosa y crónica, apareciendo en animales de dos a cinco años, con un periodo de prepatencia de tres a seis meses, y un desenlace fatal; los primeros síntomas que aparecen están relacionados con el comportamiento que posteriormente evolucionan a incoordinación, prurito, hiperestesia y caquexia.

En este trabajo se ha estudiado un total de 2753 ovinos procedentes de la Comunidad de Castilla y León que fueron enviados al Servicio de Diagnóstico Anatomopatológico Veterinario de Universidad (SEDAPV-ULE), desde los diversos Planes de Control y Vigilancia de las Encefalopatías, Servicios Veterinarios Oficiales, Laboratorios Regionales de Sanidad Animal (LRSA), veterinarios clínicos y rebaños donde se ha declarado la enfermedad. En el caso de los animales sujetos al Plan de Control y Vigilancia de las EET, el muestreo fue aleatorio entre los animales sacrificados en matadero. Los ovinos del Plan Complementario de Vigilancia de las EET se seleccionaron entre el desecho de varios rebaños escogidos al azar de las nueve provincias de la Comunidad. De los ovinos remitidos al SEDAPV-ULE se estudiaron todos aquellos animales mayores de un año de edad con procesos crónicos o nerviosos. Así mismo, se tuvo la oportunidad de estudiar 110 ovinos de aptitud lechera y raza Assaf (o cruces de esta), procedentes de tres focos declarados de Scrapie, con sintomatología nerviosa o pertenecientes a la cohorte de edad y/o genética de los casos positivos. En estos tres rebaños se tuvo acceso a los genotipos de la mayoría de los casos positivos así como a conocer la clínica que presentaron antes de su muerte o sacrificio. De todos los animales se tomaron muestras de sistema nervioso central (SNC) para su posterior procesado y estudio histopatológico e inmunohistoquímico con anticuerpos monoclonales frente a PrPres.

Los datos obtenidos en este estudio permitieron el diagnóstico de 158 casos de Scrapie, lo que indica que la prevalencia de la enfermedad es relativamente baja (5,78%), elevándose ligeramente (9,02%) si se contabilizan únicamente los animales seleccionados según sintomatología o pertenencia a la cohorte de edad o genética de los casos positivos. Por otra parte, se ha observado que la gravedad de las lesiones en el SNC y la intensidad de la señal inmunohistoquímica están directamente relacionadas con la fase clínica del animal enfermo, siendo más graves en las fases terminales. 

En cuanto a las frecuencias genotípicas y su relación con el Scrapie, hay que indicar que la mayor parte de los casos positivos (61,54% de los positivos) presentaron un genotipo ARQ/ARQ, considerado como grado tres (R3, poco resistentes a padecer la enfermedad). La elevada frecuencia de este genotipo en la mayoría de los casos positivos diagnosticados, podría deberse no sólo a la susceptibilidad genética a esta enfermedad, sino también a que se trata de un genotipo muy frecuente en los rebaños estudiados (34,57% de la población total). 

El estudio clínico se realizó en animales positivos procedentes de las granjas con un caso positivo. El primer síntoma destacable es el rechazo al ordeño que sufren los ovinos en las primeras fases clínicas, manifestado como patadas e intranquilidad. Posteriormente, el animal se retrasa al entrar en la sala de ordeño tanto por los problemas locomotores como por la desorientación que comienzan a presentar. Avanzando el proceso, se apreciaron alteraciones en la marcha, con claudicaciones del tercio posterior. Más tarde, estas claudicaciones son más frecuentes presentando el animal grandes dificultades para incorporarse. En este momento aparecen las mioclonias, evidentes principalmente en la cabeza, y el mascado en vacío. El estado del animal se agrava, muriendo tras cuatro o cinco días de postración. El prurito intenso, clasificado como uno de los signos típicos de esta enfermedad, fue observado pero de manera poco intensa.

Aunque se ha citado la predisposición de ciertas razas ovinas a presentar Scrapie, la mayor incidencia en animales de raza Assaf (o cruces de ésta) encontrada en este estudio, podría deberse a que ésta es la raza más extendida en las explotaciones de aptitud lechera del área geográfica estudiada. Así mismo, el régimen de explotación semiintensivo en ganado ovino de aptitud lechera condiciona unos signos clínicos tempranos, diferentes a los descritos en rebaños de otras aptitudes.


Autoría: M. Fuertes y colaboradores (2005)
José Luis Ares Cea (recopilación científica)